Mostrando entradas con la etiqueta Historia. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Historia. Mostrar todas las entradas

viernes, 15 de febrero de 2008

Mano Negra, la leyenda de la injusticia rural

"Ese interés abrumador por imputar a los anarquistas cualquier crimen con el fin de deteriorar la imagen del colectivo ha sido una constante en la historia de este país y de cualquier país".

Juan Madrid, historiador y periodista, en referencia a Mano Negra.

El campo andaluz siempre ha sido un foco de problemas sociales para las altas clases, especialmente para los gobiernos. El problema a finales del siglo XIX fue aún más grave: la crisis en el campo, junto a la introducción del anarquismo por parte de europeos y la ineptitud de las clases dirigentes provocaron grandes conflictos en los campos andaluces que acabaron con la muerte de inocentes.

Pero empecemos por el principio; a final del siglo XIX comienzan a llegar las tesis anarquistas a la Península Ibérica, lugar donde más raíces echará por la gran aceptación de los obreros de las fábricas en Cataluña y de los obreros del campo en Andalucía. Así, en poco tiempo suman más de 50.000 afiliados de los que más de 29.000 eran de la tierra de Blas Infante. Las ideas anarquistas calaron más allá de la teoría, y los campesinos empezaron a tomarla en práctica ante la pobreza y miseria que existía en el campo andaluz, donde los campesinos cobraban una miseria por sembrar, cultivar, arar, recoger, clasificar...dejándose la vida mañana, tarde y noche para que el terrateniente se quedara con un gran porcentaje de los beneficios. La situación, injusta, obligó a los sintierra ni esperanza a luchar por la justicia, y por ello comenzaron a quemar olivos, matar el ganado, arrancar viñedos... de los campos de los patrones, empezando el movimiento en Jerez para luego pasar a Arcos, Cádiz y Sevilla.

¿Qué pensarías si te queman tus propiedades? En vez de recapacitar y pensar en las injusticias que existían, se pensaban elegidos por dios y que había que prolongar las castas y por ello se alían los poderes fácticos se unen para presionar a las fuerzas del orden y se comienzan a detener a campesinos al libre albedrío y se les acusa de cualquier hecho. Así, en un registro en Jerez se encuentra un manual llamado "Sociedad de pobres contra ladrones y verdugos. Jerez - Europa siglo XIX", que popularmente sería conocida como la sociedad Mano Negra. La máquina del Estado ya tenía una "cabeza visible" y la represión se hace más fuerte en busca de cualquier indicio de la Mano Negra, a la que se le acusa cínicamente de matar a niños, mujeres y ancianos mientras en Trebujena más de cuatrocientos jornaleros piden al alcalde pan o trabajo (debía ser que la Mano Negra o los campesinos anarquistas les quitaban el trabajo o el pan necesario). La tensión iba a mayores y la Guardia Civil iba apresando cada vez a más campesinos, se llegaron a contar más de seis mil detenidos en Andalucía, de los que más de dos mil eran de Jerez. Los responsables de las detenciones, Oliver y Pérez Monforte fueron ascendidos por su trabajo, siendo el primero Jefe de Policía de Madrid y el segundo Jefe de Aduanas de Madrid también. Un trabajo sucio y que hay que pararse a pensar: si en el siglo XXI aún se cometen brutales torturas a pesar de la existencia Derechos Humanos, ¿qué no sufrirían los campesinos del siglo XIX que eran visto como parias y desgraciados? desde luego que serían peores que las del Crimen de Cuenca.

La leyenda de la Mano Negra acabó cuando en San José del Valle se detienen a dieciséis miembros de la Federación de Trabajadores de Región Española", que son acusados de asesinatos y a los que se les acusa de ser los miembros de Mano Negra. Se les acusa del asesinato de Bartolomé Gago Campos "Blanco de Benaocaz", que había supuestamente había abusado de una mujer y se perdía en los vicios del alcohol en vez de luchar por la justicia. Los dieciséis miembros detenidos negaban ser de Mano Negra, pero eso dio igual a jueces, abogados y al Estado. Pedro y Francisco Corbacho, los también hermanos Manuel y Bartolomé Gago de los Santos, Gregorio Sánchez, Juan Ruiz y Cristóbal Fernández fueron condenados a morir en la Plaza del Mercado de Jerez y cientos de campesinos enviado a Filipinas. Veinte años después se rehabilitaron a todos los culpables, pero a esos siete campesinos nadie los pudo resucitar ni a sus familias consolar.

Hoy, quince de febrero del 2008, aún no se sabe si existió la Mano Negra, si fue una "operación de bandera falsa" para buscar un enemigo y apoyarse en la sociedad o si de verdad existió, sin embargo es más probable lo primero como ya escribió Blasco Ibañez en La Bodega. También hoy, desgraciadamente, se le da más importancia a los terratenientes andaluces que acaparan las ayudas sociales e insultan a los jornaleros que precisamente a ellos. ¿Tenemos lo que nos merecemos?


martes, 4 de diciembre de 2007

4 Diciembre, XXX Aniversario


Hoy, 4-D, un día que para muchos andaluces no deja de ser una fecha más, anestesiados por la plutocracia, cansados de los políticos, de los poderes y de las oposiciones a lo Buster Keaton. Para muchos jóvenes, también es un día normal, en sus clases apenas atienden y tienen ganas de irse a casa, y pronto queda el puente de la Constitución; también la culpa es de la Consejería de Educación, donde no se presiona para que los andaluces estudiemos la historia de Andalucía. Pero para otros muchos, el 4-D supone uno de los días grandes de Andalucía, el día en que más de dos millones de personas en toda nuestra tierra salieron a la calle de las principales ciudades para luchar por nuestros derechos, unos derechos arrebatados por el centralismo y que desde el centro se nos querían negar a pesar de que a otros pueblos del norte les dieron todos los privilegios (¿verdad Navarra?), esta es la España de la igualdad que dicen los políticos de la derecha, la España solidaria. El 4D, el día del pueblo andaluz.

Convocada por todos los partidos políticos andaluces a excepción de UCD, convocaron una manifestación para acceder a la autonomía por el artículo 151, el artículo de las comunidades históricas y por el que se dan más competencias a una comunidad que si accedía por el 143. Andalucía no era una comunidad histórica por no haber podido tramitar su Estatuto antes del golpe de Estado de Franco. La respuesta de la población andaluza fue como tuvo que ser: multitudinaria. En Sevilla más de quinientos mil manifestantes, cincuenta mil en Málaga, más de cien mil en Granada, ochenta mil en Huelva y Córdoba, setenta mil en Cádiz, también en Jaén, diez mil en Almería, Ronda o el campo de Gibraltar y más de un cuarto de millón en Barcelona, todos aquellos emigrantes andaluces que tuvieron que ir a las industrias catalanas, se manifestaron por sus raíces, por su tierra. Los manifestantes no iban solos, iban adornando las ciudades andaluzas del blanco y verde, blanco de paz y verde de esperanza como reza la letra de nuestro himno.

Lamentablemente, la manifestación acabó cayendo sangre andaluza por las calles de Málaga, el joven García Caparrós fue asesinado a manos de policías en la manifestación de su ciudad. Un asesinato sin castigo y un asesinato que ha sido olvidado por las autoridades andaluzas y por gran parte del pueblo, un nuevo mártir de Andalucía, de la nación andaluza, treinta años pasaron, pero tu nombre quedará en nuestra historia. El asesinato vino a manos de la diputación de Málaga, que se negó a poner la bandera andaluza en el edificio, ondeando solo la española. Un joven trepó y cambió la rojigualda por la arbonaida; acto seguido las fuerzas de seguridad (esas que están para proteger al pueblo, pero protegieron al presidente de la diputación frente a cincuenta mil manifestantes...) comenzaron a cargar y a lanzar botes de humo, amén de disparar a los manifestantes, y así fue como murió Caparros.

Cabe destacar también el papel de la UCD, en esos momentos en el poder y en contra de Andalucía, no solo para no darle la autonomía y el reconocimiento como nación histórica, sino que además deseaban separarla, intentando provocar enfrentamiento entre Jaén, Granada y Almería contra Andalucía en general y Sevilla en particular. UCD quería que Andalucía no tuviera una voz fuerte, quería una Andalucía oriental y una occidental, pero el pueblo andaluz no se amilanó y consiguió echar a esos fantasmas de la separación.

Lamentablemente, treinta años después solo podemos recordar esta fecha, Andalucía se encuentra como antes de esa manifestación: atada y vasalla, pero además narcotizada y sin un futuro esperanzador, aceptando todo lo que diga Chaves (ya sea pedir menos dinero si está el PSOE en el gobierno central por la deuda histórica, ya sea eliminar medio campo andaluz por orden de Bruselas para que otros tengan más ganancias). Por eso, Andalucía, recuerda lo que fuiste, recuerda que hiciste y ¡¡levante!!





Era un cuatro de diciembre
cuando tomamos la calle.
Era un cuatro de diciembre
cuando dijimos que verde y blanca
era nuestra sangre.

Andaluces levantaos,
desde el trigo hasta la mar.
Un cuatro de diciembre
luchamos por nuestra gente,
España y la humanidad.

Días de guerra,
de fascistas en la acera
rezando a su dictador.

Tarde de espanto
Málaga entera llorando
mataron a Caparrós, Caparrós.

Y las cadenas,
cayeron nuestras cadenas
y bailaron las estrellas,
suspiraron los abuelos,
no había ya en el mundo entero
un batallón que nos pudiera.

Y las cadenas,
y el sudor de nuestra frente,
tó pá los terratenientes
pá que hicieran la faena.

Rojos contra la pared,
Blas Infante por los muros.
No al 143, si al 151.

¿Cómo se puede olvidar?
Veinte Treinta años de libertad,
libre, libre, para siempre,
qué bonita Navidad
de aquel cuatro de diciembre.

Los piratas,
comparsa de los Carnavales de Cádiz en 1998



Raza Mora

jueves, 29 de noviembre de 2007

Contra el Alzheimer social

La fundación Todos los nombres va a realizar en Andalucía una tarea importante para que los asesinados por los golpìstas en la Guerra Civil y en la posterior Dictadura queden impune. Y es que la recuperación de la memoria de los muertos es importante tanto a nivel social, como político y como personal de aquellos que tienen familiares aún enterrados en cunetas. La organización ha creado una base de datos de más de 30.000 víctimas solamente en la tierra de Al-Andalus, y en como dato escalofriante, más de 4000 personas fueron ajusticiadas y enterradas en una fosa común en Málaga, la más grande del Estado español. Es frío comparar el número de víctimas de diferentes dictaduras, pero en occidente se ha visto con el paso de los años a Pinochet como un dictador a la altura de Mussolini cuando el número de víctimas de la dictadura chilena fue menos de 3200 (pido perdón por hacer comparaciones), es decir, menos que en Málaga y hay aún quien defiende al señor bajito y con bigote (no, no a Aznar) o quién cree que es lo normalque se mataran, torturarán y esclavizaran a más de treinta mil personas.

Las Universidades públicas (especialmente la de Granada por su potencial tencológico) y la Junta de Andalucía son las principales instituticiones públicas que están ayudando a hacer posible la recuperación de los cadáveres y exhumarlos para que las familias puedan enterrarlos con dignidad, una dignidad que a algunos parece que les molesta. Luego se preguntarán que porqué nunca ganan las elecciones en Andalucía. Sin embargo, no quiero que el final de este artículo sea para recordar a los descendientes directos del franquismo, a pesar de que el aguila sea ahora una gaviota, no nos dejamos engañar. Mi últimas palabras en este artículo son para los que dieron la vida, de forma voluntaria o involuntaria, por un sistema político más justo y mejor, por ser asesinados por una dictadura y que no se les reconoce como eso ya que hay que olvidar el pasado: no habéis muerto, estáis eternamente en la memoria colectiva andaluza.

jueves, 22 de noviembre de 2007

Mariana Pineda, la libertad tiene nombre de mujer


Pedro: (Con pasión.)
¡Marianita, no temas! ¡Mujer mía! ¡Vida mía!
En el mayor sigilo conspiramos. ¡No temas!
La bandera que bordas temblará por las calles
entre el calor entero del pueblo de Granada.
Por ti la Libertad suspirada por todos
pisará tierra dura con anchos pies de plata.

Mariana de Pineda, romance popular en tres estampas,
Federico García Lorca


La libertad, esa ansiada forma de vida buscada siempre por el hombre y ante lo que otros hombres se han opuesto para mantenerse en el poder y en la riqueza. En esta lucha, surgió en el siglo XIX una mujer que demostró más valor y lealtad que muchos hombres. Nacida en 1804 entre Mariano de Pineda, abolengo de Granada, y Doña María Dolores Muñoz, de familia humilde, tuvo un comienzo difícil en este mundo, ya que sus padres no estaban casados por diferencias sociales y por presiones familiares. Así, sus progenitores se separaron y se quedo con su padre, que moriría más pronto que tarde y tuvo que ser acogida por unos amigos y sirvientes de su padre. Educada según su estatus social, fue casada a la edad de 15 años con el militar liberal Manuel Peralta, militar retirado y con mala salud, una mala salud que provocó la viudedad de Mariana con tan solo tres años de matrimonio y que la dejó con 2 hijos de corta edad.

Libertad y lealtad, valores por los que morir

La muerte de Manuel coincidió con el fin del Trienio Constitucional y el inicio de la Década Omniosa, últimos años de la vida de Mariana. La vuelta del rey Borbón provocó el cierre de periódicos, universidades y todo aquello que tuviera algún signo liberal; había que volver al Absolutismo y Fernando VII anuló todo lo cambiado durante el Trienio Constitucional. Mariana, convertida al liberalismo, empezó a participar en tertulias para conspirar, en ayudar a los presos políticos, ya fuera como enlace, ofreciendo su casa para esconder a perseguidos o para ayudar activamente en la fuga de presos, como hizo con su primo Fernando Álvarez de Sotomayor (participante en el levantamiento del ejército de Andalucía de Rafael del Riego), al que proveyó de un atuendo de monje para que huyera de la prisión. La policía estaba segura de su intervención, pero no tenía pruebas. De esta forma, Mariana se convirtió en uno de los objetivos a eliminar. Fue un soplo por parte del clero lo que provocó la detención de la heroína granadina, los bordados del Albayzin estaban tejiendo una bandera por encargo de los liberales tras una reunión en Gibraltar, y más concretamente por encargo de Mariana. La bandera, morada con un triángulo verde y con la inscripción en rojo d "Ley, Libertad e Igualdad", fue requisada por la policía y puesta en casa de Mariana, para que en un posterior registro la inculparán, como así fue. Condenada por el rey Borbón a garrote vil, se negó a romper su lealtad con el resto de complices a cambio de su libertad. El 26 de mayo de 1831 es llevada por los Campos del Triunfo de Granada para, primero ver quemar su bandera y luego morir, no sin antes haber exclamado: "
El recuerdo de mi suplicio hará más por nuestra causa que todas las banderas del mundo", y así fue, ya que la muerte de Mariana la convirtió en una martir de la libertad y del movimiento feminista, pudiendose encontrar hasta en Italia o en Argentina romances e historias inspiradas en la gran heroína. Hoy, el poder la reconoce, incluso los familiares directos de Fernando VII no tendrían reparos en dedicar insignes palabras, eso si, de forma hipócrita ya que después ante los que luchan hoy se les tacha de terroristas, como fue juzgada Mariana de Pineda.



domingo, 18 de noviembre de 2007

El centralismo castellano, eliminación de las culturas periféricas

"Un andaluz no se parece en nada a un vizcaíno, y un catalán no tiene nada parecido con un gallego; lo mismo se pude decir de un valenciano y de un hombre de la meseta".
Comentario anónimo del siglo XVIII

Trescientos años se cumplieron en el 2007 de la victoria de Almansa, por la cuál los Borbones se impusieron como nueva familia real en España. La nueva monarquía trajo para las naciones periféricas malas noticias. Los Borbones vinieron con la idea de crear la nación española (no podemos olvidar que en toda Europa se están dando ahora los movimientos nacionalistas), y para ello no dudarán en crear una cultura homogénea, aunque para elo tuviera que fulminar (o intentarlo) otro tipo de demostraciones cuturales como la lengua catalana o el euskera. Así, la creación del artificio se puede ver tres siglos más tardes cuando observamos que no hay una nación española unida, pero sí fuertes sentimientos de nacionalismos en las periferias.

Las primeras medidas para la centralización del Reino de España fue la creación, a semejanza de Francia, de provincias (en el país galo eran prefecturas y subfecturas). El siguiente paso fue la creación de una cultura, o más bien la expansión de la cultura de Castilla, con la que siempre se ha identificado el nacionalismo español, especialmente por su papel en la Reconquista española. De esta forma, los Borbones acabaron con los privilegios de Cataluña y Aragón (no así con los de Navarra, comunidad que siempre se identifica con el nacionalismo español como agradecimiento a los favores económicos y autonómicos que siempre ha tenido por parte de España) y mellaron las identidades culturales de naciones como la andaluza y también su economía, pues Andalucía se quedó a merced de Madrid y tuvo que ser la productora de materias primas ante el enrequecimiento de las industrias de la meseta y del norte.

Los Borbones impusieron de forma política y autoritaria lo que no existía en la realidad, se creó el nacionalismo español y el antinacionalismo español como respuesta al centralismo borbónico.

domingo, 11 de noviembre de 2007

Blas Infante, Padre de la Patria Andaluza

"¡Viva Andalucía libre!", fue la última frase que salió de los labios de Blas Infante. Asesinado en la cuneta de la carretera de Carmona en los primeros días de la guerra civil por las tropas falangistas.

Nacido en Casares (Málaga), en 1885, tuvo una gran actividad tanto política como filosófica. De clase media pero con ascendientes jornaleros. Superando fuertes crisis económica, como la de 1898, gracias a su capacidad autodidacta, consiguió aprobar la carrera de Derecho en la Universidad de Granada. En la ciudad de la Alhambra toma contacto con la cultura de Al Andalus. Una vez aprobada las oposiciones, marcha a Cantillana, Sevilla.

Asamblea de Ronda

En Cantillana sigue profundizando en los problemas andaluces, especialmente los de el campo. El punto de inflexión en su pensamiento lo marcó el primer discurso andalucista voz de Mario Méndez Bejarano en el Ateneo de Sevilla. El andalucismo estaba lejos de estar muerto. Así, en 1915 publica su obra El ideal andaluz. Una vez libre, después de haber estado encarcelado por intentar romper la neutralidad de España en la I Guerra Mundial, dirigió la I Asamblea regionalista andaluza en Ronda (inspirada en la Cantonalista Constitución Federal de Antequera de 1883). En esta asamblea se instituyeron los dos primeros símbolos de Andalucía: la bandera blanquiverde ( en homenaje a la primera bandera en Al-Andalus) y el escudo, inspirado en el de la ciuda de Cádiz con las columnas de Hércules. En el congreso de Córdoba, Infante reclama nuestra nacionalidad histórica y exige una España federada. Blas Infante cambia la ubicación de su trabajo y tiene que ir a Isla Cristina (Huelva), donde ahondará en las raíces culturales de Andalucía, estudiando especialmente el flamenco.

Conversión al Islam

Es cuando en España aparece la Dictadura de Primo de Rivera, con la que se niega a colaborar Blas Infante, lo que le valió la clausura de los Centros Andaluces (fundados en 1916 por Infante) y la revista Andalucía. En 1924 se convierte en musulmán y cambia su nombre por Ahmad y toma contactos con el nacionalismo gallego y con la política portuguesa y marroquí. Con la ruptura en España de la II República, Blas Infante se presenta a todas las elecciones con la esperanza de fortalecer el movimiento andaluz, pero fracasa en todos sus intentos, y a pesar de simpatizar con el movimiento anarquista, comienza a moderar su discurso para intentar ganar votos. En estos momentos su discurso se centra en arreglar el problema del campesinado (con laLey de la Reforma Agraria) y de vertebrar España en una República Federal.

En 1933, basado en el canto jornalero Santo Dios que escuchó en los campos astigitanos, compone el Himno de Andalucía, un himno en el que podemos ver la simpatía que ya advertimos anteriormente con los anarquistas al encontrar el lema "pedid tierras y libertad".

Con el golpe de Estado de los militares en 1936, Blas Infante es uno de los primeros políticos en ser apresado y fusilado sin juicio ni sentencia en el ya conocido kilómetro 4 de la carretera de Carmona. Años más tarde, el Tribunal de Responsabilidades Políticas lo condenó a muerte (evidentemente no se iban a retractar y aunque lo hicieran...desde luego no lo iban a resucitar) y a una multa economíca a sus descendientes "porque formó parte de una candidatura de tendencia revolucionaria en las elecciones de 1931 y en los años sucesivos hasta 1936 se significó como propagandista de un partido andalucista o regionalista andaluz."

Con la vuelta a la democracia, se limpió el nombre del padre de la Patria Andaluza, aprobándose por unanimidad el reconocimiento a Blas Infante como principal figura para la configuración de la nación andaluza.

Monumento a Blas Infante en Sevilla; Fuente:wikimedia commons